martes, 10 de marzo de 2009

La poesía hecha mujer...


Para conmemorar el día internacional de la mujer, quiero hablarles brevemente de una de las mejores poetisas latinoamericanas de todos los tiempos: Gabriela Mistral.



Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, llamada Gabriela Mistral (quizá por su admiración hacia Gabriele d’Annunzio y Frédéric Mistral) (Vicuña, 7 de abril de 1889 - Nueva York, 10 de enero de 1957), fue una destacada poetisa, diplomática y pedagoga chilena, que bajo el seudónimo de Gabriela Mistral se destacó de forma especial en la literatura.
Fue la primera latinoamericana (y la primera mujer en su especialidad) en ganar el
Premio Nobel de Literatura, en 1945.



La niñez de la autora está marcada por la ausencia del padre, quien abandonó a su familia cuando Gabriela todavía usaba pañales. En 1904 comienza a trabajar como profesora ayudante en la Escuela de La Compañía Baja y empieza a mandar colaboraciones al diario El Coquimbo de La Serena, Chile. Al año siguiente escribe periódicamente en el diario anteriormente mencionado y en La Voz de Elqui de Vicuña. Estudia en la Escuela Normal de Copiapó, actual Universidad de Atacama, obteniendo el título de Profesora Normalista. Desde 1908 es maestra en la localidad de La Cantera y después en Los Cerrillos. Como maestra le encantaban los estudiantes y sentía el deber de educar y enseñar. Para ella los libros eran algo sagrado. Posteriormente, en 1910, valida sus estudios ante la Escuela Normal N° 1 de Santiago y obtiene el título oficial de Profesora de Estado, otorgado por el Instituto Americano.


Y para terminar les dejo un poema de Gabriela, que particularmente me gusta mucho...


Amo Amor


Anda libre en el surco, bate el ala en el viento, late vivo en el sol y se prende al pinar. No te vale olvidarlo como al mal pensamiento: ¡le tendrás que escuchar! Habla lengua de bronce y habla lengua de ave, ruegos tímidos, imperativos de mar. No te vale ponerle gesto audaz, ceño grave: ¡lo tendrás que hospedar! Gasta trazas de dueño; no le ablandan excusas. Rasga vasos de flor, hiende el hondo glaciar. No te vale decirle que albergarlo rehúsas: ¡lo tendrás que hospedar! Tiene argucias sutiles en la réplica fina, argumentos de sabio, pero en voz de mujer. Ciencia humana te salva, menos ciencia divina: ¡le tendrás que creer! Te echa venda de lino; tú la venda toleras. Te ofrece el brazo cálido, no le sabes huir. Echa a andar, tú le sigues hechizada aunque vieras ¡que eso para en morir!

2 comentarios:

Gittana dijo...

No pudiste representar mejor a la mujer en este dia tan tan importante!!!!

Felicidades pequeña!!!!

Romina dijo...

:D Muchas gracias por tu comentario linda jejej espero q mi pequeño articulo haya sido de tu agrado, nuevamente gracias :D