viernes, 25 de mayo de 2012

Y en la tierra lloré,
vertiendo lágrimas de sangre
sobre mi pueblo.

Cenizas, palomas al vuelo
y leones guardando
esa tierra de hierba seca
y podredumbre, de olores
finos y tacto frío.

¡Ríos, inunden los adoquines de asfalto,
penetren la densa niebla del monte,
rompan la monotonía del caos!.

Romina...